¡El episodio 2 de His dark materials estuvo lleno de demasiadas sorpresas! Una montaña rusa de emociones de principio a fin, y es que con
tantas revelaciones que hacen avanzar la trama con rapidez, referencias a la
segunda y tercera novela de Pullman, además de un guiño a la película, pudo
haber sido difícil asimilarlo todo. Por si te perdiste algo al pestañear
durante la emisión, aquí analizaremos todos los elementos clave. ¡Empecemos, el
aletiómetro ya “despertó”!
Sinopsis episodio 2: "The idea of North"
Lyra ha llegado a Londres con la señora Coulter. Por primera vez se siente querida debido a las atenciones de su nueva protectora, pero pronto se da cuenta de que tanta elegancia esconde algo siniestro, y que ella misma puede ser más de lo que creyó. Mientras tanto, Lord Boreal investiga sobre la cabeza del Doctor Stanislaus Grumman y se nos devela otro mundo.
Mi opinión
Lo extraordinario
Hay cuatro personajes que brillaron cada segundo en pantalla: Lord Boreal, la señora Coulter, el mono, Pantalaimon y Lyra. Veamos por qué.
La impresión que me causó Lord Boreal (Ariyon Bakare) la semana pasada no fue en vano: realmente es tan peligroso como fascinante. Primero, por su determinación al exigir información al rector y luego aceptar, en apariencia, la respuesta, para entrar a la cripta. Segundo, esta versión televisiva del personaje es la que nos revela varias claves de la segunda novela, La daga, como las aberturas hacia otro mundo, la treta de Lord Boreal de hacer pasar la cabeza congelada como la de Grumman y la duda de quién podría haber sido ese académico en realidad.
En la siguiente imagen reuní parte de la escena en la que Lord Boreal entra a un jardín en desuso –¿acaso es el jardín de Oxford que visita Lyra al final de la tercera novela, El catalejo lacado?-. El diseño de la abertura es tan tenue como se describe en La daga, cuando Will Parry abre varias con la daga sutil: etérea y flexible. ¿Notaron que luce arañada la pared de nuestro mundo? También tomaron en cuenta que las ventanas deben pasar casi desapercibidas, a menos de que incida la luz y el espectador se encuentre cerca.
En cuanto a Grumman como académico del Jordan College y posible visitante de nuestro mundo… hay tanta ironía ahí que espero que sepan aprovecharla en la serie.
Cuando Boreal habla con Thomas (Robert Emms), un ayudante de este mundo,
jamás imaginé que le enseñaría esa foto. ¡Es tal
cual como me imaginé al explorador! En La daga se cuenta toda su historia;
una de las mejores partes del libro.
En el futuro tendremos más de Grumman, interpretado por el
actor Andrew Scott, quien estuvo antes en programas como Black Mirror. Estén
atentos a este personaje, y a su daimonion, son muy peculiares. Les daré una pista: él es conocido por tres
nombres.
Otra escena de Boreal que no podemos dejar de lado es la de su reunión con la periodista Adèle Starminster(Georgina Campbell) en el auto, pero hay que recalcar, principalmente… su cercanía con la
señora Coulter; transmiten una palpable tensión sexual que explora el
vínculo entre ambos que se sugería en La daga.
Este fue otro enorme acierto de parte del guionista, Jack Thorne; que desde el inicio le den tal relevancia al personaje, quien fue crucial en la segunda novela al buscar científicos que investiguen la materia oscura (polvo), bajo el falso nombre de Sir Charles Latrom, un excéntrico y rico coleccionista. La
escogencia del momento de la trama en que él usa la ventana resuelve, de hecho,
incógnitas que yo tenía. También me pregunto si en la
serie este Lord tendrá dos vidas en dos lugares, o si visitará de vez en cuando nuestro lado. Se está volviendo uno de mis personajes
favoritos de His dark materials.
Por otro lado, hay una estrella que quizás eclipsa al aristócrata: la señora Coulter (Ruth
Wilson).
Comenzamos a ver más facetas de esta mujer enigmática,
alguien que al parecer ha tenido que usar su belleza como arma para escalar
posiciones y volver a estar cerca de su hija. La señora Coulter es
una obsesa del control, como sugiere al insistirle a Lyra (Dafne Keen) para que
le permita “moldearla” para que aproveche todo su potencial, lo cual alcanza su
punto álgido cuando ordena a su daimonion que lastime a Pan y doblegue a la
niña. De lo que se arrepiente luego.
Esa escena fue más desesperante que en Luces del norte o en
la película La brújula dorada (2007). Creo que la razón de que en esta versión
fuese tan intensa, y larga, fue porque en el personaje se juntó la preocupación por el apoyo del Magisterio, la rabia escondida con
seducción hacia el padre McPhail (Will Keen), y el pánico al
ser desobedecida, casi descubierta, por Lyra; eso provoca asimismo que se le
escape un gran secreto. Ruth Wilson demostró ser perfecta para representar este
rol, e incluso ampliar su ambivalencia.
Como si esto no fuese suficiente, en el episodio se nos
presentó una inesperada incógnita: ¿qué es la señora Coulter? Al leer la trilogía
La materia oscura me parecía muy sospechoso que ella fuese tan irresistible, preparara una poción adormecedora potente y pudiera ver a una bruja que se
hace “invisible”. Desde ese momento me pregunté si era una bruja. Si
seguimos la línea de este episodio, la respuesta es positiva. ¿De qué otra
manera podría alejarse tanto de su daimonion? Solamente pueden hacerlo las
brujas. En El catalejo lacado, Serafina Pekkala le cuenta a Lyra que esa
separación se pudo lograr mediante un distanciamiento doloroso, traumático, y
que las brujas pueden renunciar al mundo del aire si deciden vivir con un
humano y tener hijos.
Otra sorpresa, y de la que me alegro mucho, fue cuando “la
bella dama” visita a los niños en un escondite temporal y todos la escuchan
extasiados, lo cual es un homenaje a uno de los primeros capítulos de El catalejo
lacado. En la novela, es ella quien atrapa a Billy, no el padre McPhail. En
los libros nunca pude descifrarla por completo, mientras que en esta serie es mi personaje
favorito, por toda su complejidad.
Ahora tenemos que tratar al daimonion de
Coulter: el mono dorado.
¿Notaron todas las expresiones del mono en este episodio? Mi
corazón se estrujó cuando persiguió a Pan; fue demasiado cruel,
aunque me sentí mal por él cuando la mujer lo golpea, y lo peor es que parece estar
acostumbrado a ello, lo cual hace que me pregunte si era una forma de la señora Coulter para autocastigarse también, ya que el nexo con los daimonions es profundo. ¿Y qué hay del alarido de la criatura cuando Lyra escapa? Igual a un animal al que le quitan su cría.
Hay una escena de El catalejo lacado en la que se muestra a
Coulter y al mono como un verdadero equipo; en la serie exploran,
además, los desacuerdos que puede tener el cuerpo con su alma/conciencia; otro ejemplo lo tenemos cuando la señora Coulter quema unas cartas y el
daimonion luce arrepentido. ¿Alguna vez ella ha sentido
culpa, o se “ablandó” por el breve contacto con Lyra?
Hablando de daimonions, Pantalaimon
(Kit Connor) fue el personaje entrañable de toda la hora de duración.
La voz de la razón en Lyra, retomó el carácter curioso y
temerario de la portadora cuando la joven quedó deslumbrada o demasiado
apesadumbrada por las revelaciones. Los efectos especiales mejoraron mucho como se nota en las formas de armiño, polilla y marta que toma Pan.
Seguido de esto, no crean que olvidé a Lyra. Su tiempo en pantalla me atrapó
de una manera diferente, más sutil.
¿Quién no ha sentido alguna vez la necesidad de confiar en
alguien y después es devastado por la traición? Nuestra querida protagonista
finalmente tuvo a alguien a quien admirar, fue protegida, lastimada en pocos
días. El vacío de su orfandad quedó tan latente en la escena en
la que habla con Pan tras bañarse, que debí prever que sería un episodio que me
robaría varias lágrimas.
Igual atención merece la manera en que ella entra al estudio
de la señora Coulter, un guiño directo a cuando, en Luces del norte, usa el
ducto de ventilación en Bolvangar. Espero con ansias los siguientes episodios,
en los que la joven peleará con la ayuda del aletiómetro, ¡que se ha movido por primera
vez! Me encanta que Dafne Keen logre una Lyra real, con flaquezas e impulsos,
además de valentía y compasión. Se sintió más que nunca su desesperación por
Roger.
Hasta el momento he mencionado la relación directa entre episodio y libros, no obstante, hay una referencia a la película del 2007.
¿Recuerdan el vestido que usó Lyra Dakota Blue Richards) en La brújula dorada, de color azul? Fíjense en
el tono del vestido de la nueva versión del personaje.
Lo bueno
Roger (Lewin
Lloyd) fue increíblemente valiente, insolente, empático y leal al llegar con
los demás niños y animar a Billy Costa (Tyler Howitt). ¡Cuánto confía en Lyra!
En las novelas apenas tiene un rol significativo en el tercer volumen, por
lo que hay que agradecer, de nuevo, al guionista por subsanar los vacíos en
esta serie.
Ma Costa (Anne-Marie
Duff), está al borde de la locura, aguantando la desesperación por buscar a su
hijo pequeño y proteger al que le queda, como evidencian los reclamos a Lord Faa (Lucian Msamati) y sus
temblores. Eso me lleva al rey de los gitanos, quien causó mejor impresión en
mí esta vez. El énfasis con que promete a Ma Costa hace evidente que ella le
importa, y si le agregamos el acercamiento… es inevitable preguntarse si han
tenido algo romántico antes. En Luces del norte siempre me dio la impresión,
aunque ligera.
El rector, Dr. Carne
(Clarke Peters), nos demostró por qué es el cabecilla de una universidad. ¡Cuánto
carácter tuvo al enfrentar a Lord Boreal! El daimonion cuervo también amenazaba.
En los libros era un personaje con mucho potencial que tuvo pocas escenas. Comienza a subsanarse eso, sólo deseo que no termine muerto.
Farder Coram (James
Cosmo): ¡este sí es Farder! Maravillosa elección del actor, desde su físico
sabio, calmado, hasta su voz imponente; demostró por qué es la mano
derecha de Lord Faa, el segundo al mando. Cualquier vida en sus manos estará a salvo.
Cardenal Sturrock
(Ian Peck): la conversación con el padre MacPhail produce escalofríos, pues se
nota que este nuevo personaje no tendrá compasión ante nada que se interponga al
Magisterio. Su andar encorvado hace pensar que tal vez sea por autocastigos, pues
en El catalejo lacado hay un
padre, Gómez, quien se lesiona durante años para, llegado el momento, cometer
un crimen y creer que así paga su deuda por adelantado. ¿Es el caso de
este cardenal? De ser así, ¿a cuántos ha dañado? El cardenal Sturrock es
relevante en La daga.
Tras bambalinas
Una vez terminado el análisis, ¡pasemos al detrás de escena
y la recepción!
Aunque este episodio perdió 1.500 millones de espectadores
en comparación con el primero que tuvo 7.500 millones, se ha vuelto la serie
británica más vista en los últimos cinco años, superando a The Musketeers
(2014). Es usual que el piloto de una serie tenga gran
recepción y en los siguientes no tanto, pero en este caso, además de eso, puede
deberse a que la adaptación revela rápido información muy importante para la
trama, como si no quisieran que el público que no ha leído los libros
pierda tiempo especulando. Eso puede
jugarles en contra, dado que dejan las cartas sobre la mesa desde
el principio.
De seguir así, podríamos tener sólo dos temporadas basadas en la
primera trilogía, y quizás otras basadas en la segunda trilogía de Pullman, llamada El
libro de la oscuridad; después de todo, no creo que sea coincidencia que el
autor escriba dos de los libros a la par que comienza el proyecto televisivo de
His dark materials y se emita.
Por último, hay otro elemento a destacar y es la vestimenta, con detalles
según el carácter de cada personaje y sus actividades. En el siguiente video, los
actores y la diseñadora Caroline McCall nos cuentan acerca de la selección de
prendas con un aire atemporal, basado en ropa que ya existe, y que evoca un tanto a los años 40s.
Para atenuar la espera hasta la siguiente emisión, te dejo el trailer
extendido del episodio 3 de His dark materials, titulado “The spies”. Presten mucha atención a cierta foto.
Cuéntanos, ¿qué te ha parecido el episodio? ¿También detuvo
tu corazón? No olvides suscribirte y seguir el blog para ser el primero en
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Puntuación:
10/10
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